Sándalo, la Madera Aromática Más Preciada

El olor del sándalo es un aroma muy agradable, suave y dulce. Es delicado y no carga el ambiente, pero a la misma vez es intensa y puede perdurar durante bastante tiempo, por lo que es ideal para perfumar ambientes. Tiene tonos amaderados y es muy sensual, aportando calidez al espacio donde se quema. Es un aroma que combina muy bien con otras fragancias y por ello se utiliza como base de muchos inciensos y de perfumes. ¡Te encantará!

El sándalo es el principal ingrediente del incienso japonés. Es una madera sagrada para ellos y utilizan madera de sándalo de la más alta calidad. 

Existen diferentes variedades de sándalo, y se puede encontrar en diferentes partes del mundo. Sin embargo, el de la India es el que produce mejor madera y aceite, aunque las especies del resto del mundo reciben el mismo nombre. 

Te aconsejamos quemar madera de sándalo o chandan en las siguientes situaciones:

• Si quieres impregnar tu hogar de un aroma dulce, pero muy suave y cálido.
• Cuando necesitas relajarte, evadirte, estar tranquilo y despejar la mente.
• En reuniones de trabajo, eventos familiares, visitas, con tu pareja… Idóneo para favorecer el diálogo y la comunicación.>
• Para mantener los ambientes libres de energías negativas.
• Si necesitas mejorar tu economía.
• Si estás de mal humor, estresado o enfadado. Su aroma te aporta energías positivas.
• Durante tus prácticas de meditación, yoga, reiki, visualizaciones… para alcanzar un estado de paz, tranquilidad y profunda relajación.

Dependerá del formato que utilicemos.

• Sándalo, en cualquiera de sus formas: varillas, conos, virutas, aceite esencial…
• Encendedor, velas, cerillas o cualquier otra llama.
• Recipiente o soporte a prueba de fuego: metal, vidrio o cerámica.
• Difusor o quemador, en caso de utilizar sándalo en forma de aceite esencial.

Te preguntarás de dónde proviene el sándalo. El sándalo es un árbol, Santalum album, que crece de forma natural en bosques secos y matorrales de ciertas zonas de Asia como la India, Nepal, Malasia, Indonesia y en las Filipinas, así como en algunas zonas del norte de Australia.

Desde de la antigüedad, el sándalo ha sido utilizado por diversas culturas por sus propiedades medicinales, sobre todo en la medicina ayurvédica, y por sus beneficios relajantes. Es un potente antiinflamatorio y antiséptico.

Su madera es muy preciada, pero para evitar su desaparición muchos países asiáticos han prohibido su exportación. Esto se debe a que en el pasado se ha extraído de forma abusiva, y hoy en día es una especie vulnerable y está protegida.

Sin embargo, su uso más destacable es en ritos religiosos y purificadores.  Los primeros en utilizarlo fueron los egipcios durante sus rituales de embalsamamiento. Actualmente, su uso sigue muy extendido en China, el Tíbet o la India, donde es común quemar incienso de sándalo para purificar el ambiente de malas energías y para promover un estado de relajación que favorece prácticas como el yoga o la meditación.

Para los hinduistas y budistas, el sándalo es un árbol sagrado y su aroma no puede faltar durante las meditaciones. En Japón, el sándalo es considerado un símbolo de armonía y equilibrio. Por ese motivo, los samuráis perfumaban su armadura con incienso de sándalo antes de las batallas para estar serenos en la guerra.

En sánscrito se le conoce como chandra y en chino como tan xiang.